¿Qué es el lipofilling?
Consiste en la aspiración de una pequeña cantidad de grasa del cuerpo (abdomen, glúteos, caderas, etc.) mediante anestesia local y su posterior infiltración en zonas del rostro donde haya una depresión (surcos nasogenianos, etc.) o se quiera aumentar el volumen (pómulos, labios, etc.). Esta técnica no requiere puntos y se denomina Lipofilling.
¿Cómo se realiza el lipofilling?
Mediante una fina cánula especial que no daña el tejido adiposo, se extraen pequeñas cantidades de grasa. El proceso es muy similar al de la miniliposucción y normalmente la grasa se extrae de la zona del abdomen.
Una vez que hemos extraído la grasa, esta se trata mediante un proceso especial que consiste en su centrifugado, mediante lo que se consigue separar las células vivas de las muertas. Una vez que tenemos localizadas las vivas, estas se inyectan en el rostro.
De nuevo mediante micro cánulas, conseguimos transferir la grasa de nuestro cuerpo de una zona en la que sobran a una zona en la que faltan.
¿Cuánto dura la intervención del lipofilling?
El tiempo de intervención para realizar el lipofilling es menor a una hora y además no requiere hospitalización.
Los especialistas, es realizar un total de 2-3 sesiones hasta conseguir un volumen que satisfaga las expectativas de los pacientes, puesto que de la grasa total que se extrae por sesión, el porcentaje aprovechable varía entre un 30%-70% por ciento dependiendo de las propias características del paciente.
Ventajas del relleno lipofilling
Permiten modelar aquella zona de la cara que el paciente quiere resaltar (pómulos, labios, mejillas…)
Mejora la textura de la piel, que se muestra más tersa y luminosa
Reduce arrugas y líneas de expresión
Suelen tener un precio muy asequible
El tratamiento es rápido, eficaz y seguro
No suelen provocar alergias, ya que están compuestos por materiales biocompatibles
Los resultados son naturales